El bichito musical en el año del software

¿La música evoluciona con el tiempo o el tiempo evoluciona con la música? La música siempre será patrimonio de la vida, pero no pasa lo mismo con el negocio del asunto: la industria musical. Con el avance tecnológico, nuevas exigencias recaen en el sonido de la música, nuevas demandas y por sobre todo, una nueva visión del consumidor. El sintetismo en la música juega en contra del espíritu propio del arte, el arte proviene del alma e improvisado. Pero a pesar de sonar como una violación al arte, la misma tecnólogia y las inmensas utilidades que estas pueden tener, complementar el arte original de la música y la tecnología puede llevarte a encontrar tu centro. Así lo hacen muchos productores hoy en día, grandes productores. Existen algunos Softwares como Fl Studio o Pro Tools y todas sus heramientas, pueden ser un tremendo añadido para desenvolver la imaginación y valerse de sus ventajas.

 

¿Qué te parecería grabar una pista de guitarra y hacerle un pequeño delay con un programa como Fl Studio o Pro Tools apenas tienes el audio? Una facilidad tremenda es la que hay hoy en día para crear grandes obras maestras, sin embargo, esa no es la intención de los productores de hoy en día -en su mayoría-.Sobre todo en el espectro latinoaméricano y la llegada del famoso reggaeton, los productores musicales se valen en casi al 100% en softwares, con producciones básicas y genéricas, haciendo oídos sordos a la infinidad de herramientas que tienen para crear una pieza gorda. La misión de por estos días es componer un coro pegajoso, unas líneas de sintes paupérrimas, y unas percusiones que se repiten en todos los temas. Pero no importa, ¿la gente igual coreará ésto no? Sí que lo hará, y hasta podría comprar nuestro disco.